Residencia Dolors Aleu
La decisión que volumétricamente el edificio tenga 2 escalas diferentes, para dar respuesta a los 2 entornos diferentes, conlleva la aparición de un zócalo de 3 plantas que recorre la calle Marqués de Santa Ana y una pieza de siete plantas vertida en el interior de la manzana que, en este caso, queda abierto, dada la existencia de un jardín urbano en el cruce de la Ronda del Mig con la calle Homero.
En general, las fachadas que pertenecen al zócalo se relacionan materialmente con los edificios de su entorno inmediato mediante un revestimiento pétreo y el cuerpo superior se reviste con una fachada prefabricada. En el zócalo, se propone un panel de GRC, con acabado de listones de madera para darle un aspecto más cálido y doméstico.
En el volumen superior se han utilizado paneles de chapa perforada de aluminio. Su superficie ha sido tratada volumétricamente para darle una textura más arquitectónica. Allí donde es necesario, por las condiciones de protección solar o por la intimidad de los residentes, los módulos que queden frente a las aberturas serán practicables y permitirán la regulación de la entrada de luz.
Funcionalmente, el edificio tiene 2 plantas de servicios generales (plantas sótano y baja), 6 plantas con unidades de habitaciones, y una planta técnica destinada a los equipos de instalaciones.